miércoles, 13 de marzo de 2013

UDO LATTECK EL VAN GAAL ALEMAN


El entrenador alemán mai va saber incrustar les seves dues estrelles Maradona y Schuster


El intent per establir el fútbol alemany que dominaba fins aleshores va durar dues temporades en el Barça 81-83.                                      



Entrenador dur, carismàtic agressiu i amb molt de caràcter son alguns del adjectius que conformen el tarannà de un dels millors entrenadors de la historia del futbol. De fet, continua sent l’únic entrenador que ha guanyat la lliga de campions, la copa de la UEFA y la recopa en tres equips diferents el Bayern de Munich , el Borussia Moenchengladbach, F.C. Barcelona.

Udo va néixer el 16 de Gener de 1935 a la Prussià oriental que pertanyia Alemanya, y que actualment es l’àrea de Polònia. Va ser entrenador del F.C. Barcelona (1981- 1983), va ser entrenador en l’època de Schuster amb l'arrivada del alemany al Camp Nou  y la temporada següent de un jovenísim Diego armando Maradona que pots temps després es convertiría en el millor jugador del món.

Com entrenador del F.C. Barcelona va veure com el equip perdia una lliga que tenia guanyada. De fet, el quadre blaugrana disposava abans de enfrontar-se contra el Espanyol a casa, de un coixí de cinc punts quan restaven vuit per a la finalització del campionat. Però la lesió de Schuster a meitat de temporada va provocar que el equip no pugues mantenir el seu avantatge y perdés una lliga que tenia guanyada.

El entrenador alemany sempre amant de la psicologia y de la estratègia segons deien ex-jugadors seus como Alexanco o Julio Alberto sempre utilitzava un 4-3-3 per que casava amb el seu plantejament ofensiu el mateix que tenia el F.C.Barcelona. Aspectes claus per entendre com l’equip es va aixecar per poder aconseguir la seva segona recopa contra el Standard de Lieja al Camp Nou amb gols de Quini y del petit Simonsen. El equip Belga era innovador per fer aquella estratègia tan poc utilitzada fins aleshores, com era avançar els seus jugadors per provocar el fora de joc.

En aquell moment el barcelonisme es va veure recompensat per la lliga que havia perdut incomprensiblement. Però no tots els aficionats y la directiva van quedar prou contents, la lliga perduda va fer mal y el Barcelona es va fer a la temporada següent amb Diego Armando Maradona per 1.200 millones de pessetes, fitxatge record en la historia del futbol.

A principi de temporada tothom donava per fet que aquest equip entrenat per el millor entrenador del moment, y amb dos del millors jugadors del mon com eren el Alemany y el argentí, arrasaria en el campionat de lliga. Doncs res mes lluny de la realitat, y es que Udo donava molta importància el joc d’equip per damunt de les individualitats, però les seves estrelles no estaven d’acord amb aquest plantejament y Schuster que es va lesionar en un partit contra el Athletic de Bilbao de lliga la temporada anterior, veia com podia perdre el seu lloc en detriment de l’argentí.

Recordem que abans nomes es podia jugar amb 2 jugadors estrangers y el barça en tenia 3 per tant havia de descartar un cada partit. L’egoisme del jugador alemany va provocar que vulgues jugar molts dels partits lesionat amb una cama trencada i ,per tant, perjudicar el rendiment de l’equip.

D’ell jugadors com el Lobo Carrasco o Victor Muñoz destacaven el esperit de victòria però també la seva poca adaptació als companys. Així amb aquestes mancances y amb un Maradona que no s’adaptava a la estratègia del seus entrenador el F.C. Barcelona va deambular a la lliga on no va tenir cap opció de guanya-la.

Veient aquesta situació Jose Luis Nuñez va decidir un canvi de entrenador y es va decantar per la opció que demanava el vestidor, com es l’arribada de Cesar Luis Menotti la temporada 83-84.

Amb aquest breu període s’acabava un dels projectes mes ambiciosos, però que va finalitzar només amb una recopa i una copa del Rey. Començava un periode nou que res tenia que veure amb el anterior. 




lunes, 11 de marzo de 2013

Reportage del derbi de San Mamés

Espectacular ambiente en San Mames, antes de presenciar uno de los derbis mas interesantes del fútbol español. Tanto la afición de Donosti como la de Vizcaya, se agermanan antes del partido y se reúnen en bares y locales de la calle Pozas, vía principal que da acceso al estadio.
No es un partido cualquiera, es un derbi en todo lo alto se miden el Athletic equipo que lucha por posiciones de salvación, y la Real equipo que lucha por entrar en europa. Como quedó el partido? En el siguiente vídeo descubrimos la respuesta............




jueves, 28 de febrero de 2013

EL DESASTRE ORGANIZADO DE ALEMANIA ORIENTAL




En los años '70 y '80, Alemania Oriental logró mejorar notablemente la performance de sus atletas en los Juegos Olímpicos. De hecho, con la nadadora Kornelia Ender como bandera, fue una de las naciones con mejor actuación en los Juegos de Montreal, en 1976.
La Alemania Oriental compitiendo en los
Juegos Olímpicos de  Montreal 1976
Con el tiempo se supo que miles de atletas del Este recibían esteroides y sustancias que mejoraban su rendimiento, sobre todo para demostrar su superioridad sobre el oeste. Muchos de los deportistas pensaban que estaban tomando vitaminas... No era así. Y expusieron su organismo y su salud a un tratamiento que podía generarles cáncer, malformaciones, infertilidad, cambios hormonales y hasta una muerte prematura.
Tras la caída del Muro de Berlín, en 1989, varios de los involucrados salieron a confesar su dopaje, parte de los planes del gobierno para lograr medallas y generar una identificación nacional a partir del deporte. La propia Ender dijo que recibía inyecciones desde los 13 años. Otra nadadora, Barbara Krause, sostuvo que no la dejaron participar de los Juegos del '76 porque los médicos habían calculado mal la cantidad de drogas que le habían aplicado y temían que diera positivo en un control.
Kornelia Ender ganadora
de 5 medallas de oro en Montreal 1976
El gobierno resultó implicado en programas de dopaje que abarcaba el uso del Oral Turinabol (esteroide androgénico) y experimentos con atletas para desarrollar nuevas drogas estimulantes no incluidas entre los fármacos. El nadador Raik Hanneman, medalla de plata en los campeonatos europeos de 1989, fue claro al explicar las razones que le llevaron a doparse: "era la única forma de integrarme en los privilegios del sistema: quería un apartamento, un coche y una buena educación. Eso sólo podía lograrlo gracias al deporte". Hanneman era un prisionero del sistema. El que se negaba al suministro de sustancias era apartado de la elite y la posibilidad de entrenar. La saltadora de longitud Heike Drechsler, de la RDA, ha mantenido su nivel, siempre entre las mejores del mundo, después de la reunificación alemana. Ella siempre lo negó, pero se la señala como conejillo de indias del régimen. Su colega Heike Henkel, saltadora de altura, abanderó una cruzada contra el dopaje: compitió siempre con camisetas con leyendas como "Athletics without doping" (Atletismo sin dopaje) y "In the top without doping" (En lo más alto, sin dopaje). En la piscina, la diáspora de deportistas autómatas que ya no baten records, es aún más sospechosa. Astrid Straus, ex campeona del mundo de 800 metros, obtuvo sus mejores éxitos en la pubertad. Al entrar en la veintena, su peso se disparó de forma desproporcionada. Compitió en una prueba de la Federación Internacional, y fue la primera nadadora de la RDA que descubrió el pastel que se había cocinado en la RDA en los 70 y los 80. 
La Alemania Oriental queda segunda del medallero
 en los Juegos de Montreal 1976
Hasta entonces, marzo de 1992, sólo había referencias de médicos, entrenadores y nadadores, siempre referidas al pasado. Otras, como la ex plusmarquista mundial de 100 metros mariposa a finales de los años 70, Chistiane Knacke, reveló que llegó a tomar entre 10 y 15 píldoras diarias de esteroides: se vio obligada éticamente a declarar al comprobar los desarreglos hormonales que sufría su hija, el aborto que tuvo su compañera Andrea Pollack y las deformaciones de los dos hijos de la ex campeona mundial de 100 y 200 metros Barbara Krausse. La célebre Katrin Krabbe también perdió en marzo de 1994 el hijo que esperaba. Otras campeonas, como Kristin Otto, que ganó seis oros en Seúl 88, negaron todo repetidas veces con cierta indignación. Pero el catedrático de la universidad de Heidelberg Werner Franke, la dejó en evidencia en el diario Berliner Zeitung. En un control antidopaje realizado por las autoridades de la RDA en Bonn, en 1989, Otto, Daniela Hunger, Dagmar Hase y Heike Friedrich, las reinas de las piscinas en los 80, superaron hasta seis veces los niveles permitidos de testosterona. Todas acabaron saturadas de medallas en aquella competición. Tras la desaparición de la RDA, 300 médicos han emigrado a Austria, Italia, Hungría, China, Corea y España, según han denunciado algunos especialistas. Los Juegos de Seúl 88 marcan el punto de inflexión en la historia de las trampas, como apuntó el doctor Juan Manuel Alonso, de la Federación Española de Atletismo.
Laboratorios alemanes donde se producían los casos de dopaje
Finalmente un tribunal alemán decretó que la máxima autoridad del deporte en Alemania Oriental, Manfred Ewald, y el médico Manfred Hoeppner eran culpables por "dopaje sistemático en deportes competitivos".





jueves, 21 de febrero de 2013

"ALEXANDER BELOV" MÁS QUE UNA CANASTA

UNA POLÉMICA FINAL DE BALONCESTO EN LOS JUEGOS OLÍMPICOS DE MÚNICH DE 1972 SIRVIÓ PARA REVIVIR EN LA CANCHA LA GUERRA FRÍA ENTRE ESTADOS UNIDOS Y LA URSS

HASTA EL MOMENTO DE SU DESINTEGRACIÓN, EN 1991 LA URSS LOGRÓ ALZARSE CON UNA MEDALLA DE ORO MÁS: LA DE LOS JUEGOS OLÍMPICOS DE SEÚL DE 1988.

BELOV JUGÓ EN EL SPARTACK DE LENINGRADO HASTA SU MUERTE. EN 2010 UNOS VÁNDALOS ASALTARON SU TUMBA Y SE LLEVARON LA REPRODUCCIÓN DE UNA MANO CON UN BALÓN DE BALONCESTO.




Por desgracia, los Juegos celebrados en Múnich en 1972 no solo recordados por cuestiones deportivas. La competición quedó enturbiada por la irrupción en la Villa Olímpica del comando palestino Septiembre Negro, que secuestró a once de los veinte integrantes de la delegación israelí. Tras unas tensas horas en las que los representantes árabes trataron de negociar a la desesperada, rehenes y captores resultaron muertos en el intento de rescate llevado a cabo por las autoridades alemanas. Pero sería injusto pasar por alto que en los XX Juegos Olímpicos de verano sucedieron algunas de las mayores gestas de la historia del deporte mundial. Solo un ejemplo: en la capital bávara el nadador estadounidense Mark Spitz estableció una marca para el recuerdo al conseguir siete medallas de oro en una misma competición.

La mayor sorpresa en Múnich llegó en la final del torneo de baloncesto, en la que la URSS consiguió vencer a la selección norteamericana. Fue la primera derrota de Estados Unidos en unos Juegos, en los que se había alzado con el oro en las siete ocasiones anteriores en las que había participado( desde los juegos de Berlin en 1936). Era tal su ventaja respecto del resto de contrincantes que el combinado nacional acudía a las citas olímpicas no con jugadores profesionales sino con jóvenes procedentes de las ligas universitarias.

Ambos conjuntos superaron la primera fase de la competición de manera inmaculada, con siete triunfos de siete posibles. En las semifinales tanto estadounidenses como soviéticos se deshicieron con facilidad de Italia y Cuba respectivamente. La esperada final estaba servida, las dos potencias políticas mundiales frente a frente. No se trataba de un partido más,  era otro capitulo de la Guerra Fría en la que estaban inmersos ambos enemigos históricos. Estados Unidos era consciente de su superioridad a pesar de que no contaba en sus filas con Bill Walton, pivot de los Bruins de UCLA, y gran dominador del campeonato universitario, que había renunciado a jugar en Múnich. La selección de la URSS alineaba a un bloque de jugadores muy experimentados en competiciones internacionales sabedores de que estaban mas cerca que nunca de la victoria.

El partido comenzó con dominio de los soviéticos gracias a la aportación de su estrella Sergei Belov que unos años mas tarde se convirtió en el primer jugador no estadounidense en ser incluido dentro del Hall Off Fame. Las largas posesiones y una férrea defensa permitieron que los soviéticos llegaran con ventaja de 26 a 21 al descanso. Tras la reanudación, la tónica del partido siguió siendo la misma: los norteamericanos no conseguían imprimir velocidad a su juego. A  falta de diez minutos para el final el marcador se puso en su contra (38 a 28). Ante la crítica situación Henry Iba seleccionador estadounidense solicito tiempo muerto y reordenó la táctica de su equipo convirtiéndolo en una defensa presionante sobre toda la pista. Así pudo conseguir rebajar la desventaja en el marcador hasta acercarse a un punto de los soviéticos (49 a 48).

Alexander Belov y Dwight Jones luchan
por el balón en la polémica final 
Tras interceptar un pase, Doug Collins, quiso dar la vuelta a ese resultado y se fue directo a canasta.
Pero fue parado en falta cuando intentaba anotar una bandeja, Quedaban tres segundos para la conclusión del encuentro y Estados Unidos disponía de dos tiros libres para lanzar.

Doug Collins, dolido todavía por la falta recibida, se dispuso a ejecutar esos tiros libres. Anoto el primero dejó empatado a 49. Cuando le toco lanzar el segundo, sonó la bocina pero el juego siguió y el balón entró, lo que suponía la primera ventaja en todo el partido de los norteamericanos en el marcador (49-50). Con tres segundos por jugar los soviéticos sacaron rápido para lograr una canasta, pero los árbitros del encuentro pararon el juego a falta de un segundo por un tiempo muerto solicitado por el seleccionador de la URSS. Comenzaba la polémica.

Euforia del conjunto soviético después de la victoria 
El equipo estadounidense se quejó de la decisión, ya que las normas de la época solo permiten conceder el tiempo muerto antes de lanzar el segundo tiro libre. Los colegiados, tras consultar a la mesa,decidieron aceptar el tiempo. Al reanudarse el partido, el reloj marcaba un segundo por disputar. Los jugadores movieron el balón y rápidamente sonó la bocina que señalaban el final sin dar tiempo apenas a un lanzamiento. Los norteamericanos saltaron a la pista para celebrar el triunfo mientras los rivales protestaban en la mesa de anotadores.


Fue cuando entonces William Jones, máximo mandatario de la FIBA, bajó a la cancha y ordenó volver a reanudar el encuentro situando el reloj a falta de tres segundos( como estaba tras los tires libres de Doug Collins). Fue entonces cuando se produjo la gran hazaña: los soviéticos realizaron un impresionante pase a canasta que fue capturado entre dos defensores por Alexander Belov, que logró los dos épicos puntos que les dieron el triunfo (51-50).


Estados Unidos no estaba dispuesta a asumir la primera derrota de la selección de baloncesto en la historia de los Juegos Olímpicos, por lo que elevó una protesta formal. Esa misma noche se reunió un comité especial formado por cinco representantes de la Fiba para decidir la legalidad o no del resultado. La votación fue favorable a la URSS. Los tres votos pro-soviéticos fueron concedidos por Hungría y Cuba, mientras que Puerto Rico e Italia se manifestaron en contra.

Tras conocer esta votación los jugadores norteamericanos abatidos se negaron a recoger las medallas de plata, que continúan guardadas en un banco suizo. Cada año el comité Olímpico Internacional envía a Estados Unidos una carta solicitando su recogida, pero ningún jugador ha aceptado la polémica distinción hasta el momento.  


ALEXANDER BELOV

RUSIA
Leningrado, 9 de noviembre de 1951
Leningrado, 3 de octubre de 1978.

Deporte
Baloncesto (Pívot)

Palmarés olímpico
Juegos de Múnich de 1972
medalla de oro en la competición de baloncesto 
Juegos de Montreal 1976 
Medalla de bronce en la competición de baloncesto.



martes, 19 de febrero de 2013

MICHAEL JORDAN ¿EL MEJOR DEPORTISTA DE LA HISTORIA?

Michael Jordan campeón de la NBA en seis ocasiones, es considerado a día de hoy el mejor jugador de todos los tiempos en el mundo del baloncesto.


El jugador procedente de la universidad de North Caroline, es aún el jugador que vende mas camisetas después de su retirada en el año 2003.



Nueva York, 1963) Jugador de baloncesto estadounidense, uno de los mejores jugadores que ha tenido la NBA y el mejor anotador de la historia. Cuando Michael cumplió 13 años, su padre hizo construir una cancha de baloncesto en el terreno situado detrás de su casa, donde empezó a ser la admiración del barrio y de los vecinos que se juntaban las tardes de los fines de semana para jugar al baloncesto y hacer barbacoas.

Camiseta de Michael Jordan North Caroline
En 1981 ingresó en el equipo de la Universidad de Carolina del Norte, y ya al año siguiente era elegido mejor jugador de la temporada. En el verano de 1984, cuando Michael ya era conocido en Estados Unidos con el apodo de "he can do it all" (puede hacerlo todo), formó parte de una de las mejores selecciones norteamericanas de baloncesto que, bajo la dirección del rígido Bobby Knight (entrenador de la Universidad de Indiana), se alzó con la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles (1984), tras batir en la final a la selección española. El quinteto estadounidense (Leon Wood, Michael Jordan, Sam Perkins, Wayman Tisdale y Patrick Ewing) arrasó a todos sus rivales, con lo que la aureola de Jordan comenzó a brillar en todo el mundo.


En 1984 fue fichado por los Chicago Bulls, equipo en el que permaneció a lo largo de toda su carrera deportiva y con el cual obtuvo seis campeonatos de la NBA. Al año siguiente en un partido de verano que disputan las máximas estrellas de la NBA de exhibición, para dar a conocer el baloncesto norteamericano fuera de los EEUU ocurrió esto.....



Se produce un mate bestial en un partido en Trieste (Italia) 1985 y convierte el tablero en polvo.
Máximo encestador en diez temporadas, obtuvo un promedio de 32 puntos por partido, récord absoluto de la NBA, y fue elegido mejor jugador en 1988, 1991, 1992, 1996 y 1998. Acudió a su segunda cita olímpica en Barcelona 92, pero esta vez como miembro del equipo profesional "Dream Team", con el que repitió el oro que ya consiguiera como universitario en Los Ángeles.




En octubre de 1993,, Michael Jordan anunció que se retiraba del baloncesto, alegando que ya no disfrutaba jugar como antes. Además, la muerte de su padre en julio influyó mucho en su decisión. James Jordan fue asesinado el 23 de julio de 1993 en un área de descanso de una carretera en Lumberton, North Caroline, por Daniel Green y Larry Martin Demery, quienes posteriormente serían condenados a cadena perpetua. Tras el asesinato, los delincuentes robaron además el Lexus que Michael había regalado a su padre, valorado en 40.000 dólares. Jordan crearía un club Boys & Girls en Chicago dedicado a su padre, llamado James Jordan Boys & Girls Club.

Michael Jordan dispuesto a batear con los Chicago White Sox
Tras el asesinato de su padre, Jordan sorprendió al mundo del deporte firmando un contrato con Chicago White Sox, un equipo de béisbol de una liga mayor, la American League, según Jordan el motivo de comenzar a jugar al béisbol era por una vieja promesa que hizo con su padre, recién fallecido. Jordan comenzó a entrenar en verano y el 31 de marzo de 1994 fue asignado al equipo. Los White Sox era otro equipo en propiedad de Jerry Reinsford, el propietario de los Bulls, quién continuó honrando el contrato baloncestistico de Jordan en sus años dedicados al béisbol. Fue parte de los Chicago White Sox por el espacio de 17 partidos en las ligas mayores antes de ser bajado a las ligas menores (Birmingham Barons). La carrera de Jordan en Birminghan Barons, un equipo afiliado a los White Sox, no fue nada espectacular, y pronto decidió colgar el bate para regresar a la NBA. Regresó a la mejor liga del mundo en marzo de 1995 y se convirtió nuevamente en la estrella de los Chicago Bulls. Consiguió para su equipo un nuevo título en 1996.

Campeón de la Nba Michael Jordan por sexta vez
Cuando regresó, la NBA no le permitió usar el número 23, que había sido retirado de los Bulls. Poco después el supersticioso Jordan solicitó un favor especial y los responsables del torneo le permitieron jugar con el mítico número. Otra de las numerosas manías de este genial baloncestista es llevar debajo de la indumentaria de los Bulls prendas de la Universidad de Carolina del Norte, en cuyo equipo logró los primeros triunfos importantes.

momento de la retirada en 2003
Considerado el mejor jugador de baloncesto de todos los tiempos, dentro de la cancha destacó por su rapidez, elegancia e inteligencia, y fuera de ella, por su sencillez y honestidad. Se retiró definitivamente en 2003, tras haberlo hecho en dos ocasiones anteriores, en 1993 y 1999.

La vida del histórico número 23 de los Bulls de Chicago -actual propietario de los Bobcats de Charlotte- trascendió lo estrictamente deportivo y acabó desencadenando en un fenómeno fan que continúa a día de hoy. Sus seguidores siguen aumentando pese a su retirada. Las camisetas con su número 23 siguen en la lista de las más vendidas y Nike, su marca deportiva, sigue reeditando un año tras otro sus conocidas zapatillas 'Air Jordan'.

Para mas inri, en declaraciones a Usa Today el jugador de los Bobcats, Michael Kidd-Gilchrist (número 2 del draft del 2012),reconoció que perdió un enfrentamiento cara a cara contra su jefe, lo que demuestra el buen estado de forma que mantiene el mejor jugador de la historia del baloncesto. "Fue duro para mí. Perdí. Perdí contra una persona de 50 años... Es el mejor hombre que ha jugado nunca a este deporte. Sí, es muy bueno", reconoció Kidd-Gilchrist. 




Biografía y palmarés de Michael Jordan
• Ganó 6 campeonatos con los Chicago Bulls.
• 2 veces medalla de oro olímpico (Los Ángeles 1984 y Barcelona 1992)
• 6 veces MVP de las Finales (1991, 1992, 1993, 1996, 1997 y 1998)
• 5 veces MVP de la Temporada (1988, 1991, 1992, 1996, 1998)
• 14 veces All-Star
• Mejor Defensor del Año (1988)
• Rookie del Año (1985)
• 10 veces conformó el Mejor Quinteto de la NBA
• 9 veces en el mejor equipo defensivo de la temporada
• 10 veces máximo anotador
• 3 años líder de robos
• 1 premio al mejor defensor de la temporada
• Ganó 2 concursos de Volcadas (1987, 1988)
• Naismith College Player of the Year (1984)
• John R. Wooden Award (1984)
• Adolph Rupp Trophy (1984)
• ACC Men's Basketball Player of the Year (1983–84)
• 10 títulos de máximo anotador
• Mayor promedio anotador en la historia (30.1)
• Mayor promedio anotador en la historia en playoffs (33.4)
• Mayor promedio anotador en finales (40.1 en 1993)
• Anotó 40 o más puntos en 211 partidos (173 temporada regular, 38 playoffs)
• Anotó 50 o más puntos en 39 partidos (31 temporada regular, 8 playoffs)
• Nombrado mejor jugador de la historia de la NBA
• Condecorado como Atleta del Siglo
• Condecorado como Atleta Masculino de la Década (1990's)
• Condecorado como Pro Basketballer de la Década (1990's)
• Condecorado por la mejor Jugada de la Década
• Deportista del Año (Sports Illustrated, 1991)
• 49 tapas en Sports Illustrated





lunes, 18 de febrero de 2013

ANTON GEESINK EL HOLANDÉS LUCHADOR

EL JUDOKA HOLANDÉS REALIZÓ UN IMPOSIBLE: GANAR LA MEDALLA DE ORO EN JUDO, DEPORTE DONDE LOS ANFITRIONES DE LOS JUEGOS DE TOKIO DE 1964 ERAN CASI COMO DIOSES 

POR SU CONTRIBUCIÓN AL DEPORTE Y EN ESPECIAL AL JUDO, GEESINK FUE CONDECORADO CON LA ORDEN DEL SAGRADO TESORO CON RAYO DE ORO QUE CONCEDE EL GOBIERNO DE JAPÓN 


Ese dia hubo tantos llantos, hombres y mujeres frotándose los ojos, caras de asombro silencio incredulidad y mucha admiración. En los juegos de Tokio el judo formó parte por primera vez del programa olímpico. La idea de los organizadores era sencilla: ganar todas las medallas posibles en una disciplina en la que aparentemente los japoneses no tendrían rival. Pero las cosas se torcieron aquel 23 de octubre de 1964. Sobre el verde tatami del Budokan, el incuestionable templo universal del judo , un holandés gigante no solo se proclamó campeón, sino que lo hizo ante el ídolo local. Aquella inolvidable final que enfrentó Anton Geesink y Akio Kaminaga duró apenas nueve minutos. Tiempo mas que suficiente para que 15000 personas  asistieran a la mayor derrota inflingida a Japón tras la Segunda Guerra Mundial.

Anton Geesink y el japonés Kaminaga durante la final
de judo de los Juegos de Tokio
El judoka Anton Geesink era un coloso: media casi dos metros y pesaba unos 125 kilos. Los años previos a la celebración de los Juegos Olímpicos había decidido trasladar su residencia a Japón para mejorar su técnica y comprender el deporte que tanto amaba desde su misma esencia. El enorme talento, del no menos enorme holandés, hizo el resto. Para alcanzar esa final que derribó todo los cimientos que sustentaban el orgullo nipón, Geesink realizó una competición impecable. En semifinales el ippon que le sirvió para meterse en la final tardó en llegar 12 segundos. El enemigo batido fue el australiano Theodore Boronovskis. Claro que Kaminaga no era menos rápido: a las primeras de cambio acabó con los sueños del Filipino Thomas Ong en solo cuatro segundos. Todo un récord que no sería superado hasta los Juegos de Barcelona de 1992, en los que el cubano Andrés Franco empleó tres para derrotar a Illus Isako, de Zaire.

Ya el año anterior a los juegos, en 1961, Anton Geesink había avisado de lo que era capaz, al ganar al japonés Koji Sone en el transcurso del Mundial celebrado en París. Olía a revancha en Tokio, donde parecía que Kaminaga ejercería el papel de vengador.  Los primeros momentos del combate fueron equilibrados, meditados al milímetro. Había tensión en el ambiente, una tensión que acabo precipitadamente cuando Geesink consiguió bloquear en el suelo a Kaminaga, que intentó inútilmente zafarse de su adversario.
Tras cumplirse los trienta segundos reglamentarios de inmovilización, el juez dio como vencedor al Holandés, que logró instantes después el más difícil todavía: que en el Budokan, los 15000 espectadores que solo querían llorar se levantaran y aplaudieran al ganador. Un gesto que se repitió durante la entrega de medallas. Japón estaba de luto, pero reconocía al que era por méritos propios el justo vencedor.

Judoka Holandés durante la entrega de medallas de los Juegos de Tokio
Akio Kaminaga no pudo triunfar en la categoría Open- para todos los pesos-. pero en las demás, al menos Japón fue invencible. Nakatani, Okano y Inokuma, otros ídolos locales, sí pudieron subir a lo más alto del podio. El gran derrotado se retiró definitivamente de la competición en 1968: nunca pudo superar la humillación sufrida en Tokio. Y, aunque leyendas urbanas dicen que se suicidó tras el gran varapalo sufrido, lo cierto es que siguió vivo y llegó a ser entrenador del equipo Olímpico de judo que participó en los Juegos de Barcelona de 1992. Falleció un año más tarde a causa de un cáncer. El que si que hizo el harakiri- de ahí la confusión- fue el atleta Koichi Tsuburaya que en Tokio llegó en tercer lugar en la segunda carrera olímpica de maratón que ganó Abebe Bikila, tras ser superado por el inglés Basil Heatley casi a punto de cruzar la línea de meta.

Aunque su mayor éxito fue su victoria a domicilio en los Juegos de Tokio, Anton Geesink siguió cosechando triunfos después de aquella final. En 1965 se proclamó de nuevo campeón del mundo y, hasta su retirada, sumó 13 títulos europeos. Cuando dejó de competir se dedicó a la enseñanza. Formó parte del Comité Olímpico Internacional hasta su muerte en verano de 2010.

Fue uno de los cuatro judokas de la historia que consiguió el décimo dan, el mayor escalón al que puede llegar un deportista en esta disciplina, junto a Daigo, Abe y Osawa, los tres grandes maestros nipones. El gigante que hizo llorar a Japón, el primer occidental en ganar la medalla de oro en judo en unos Juegos, siempre fué muy querido tan lejos de su casa.

 

Anton Geesink 
Holanda 
Utrech, 6 de abril de 1934
Utrech 27 agosto de 2010 

Deporte
Judo

Palmarés Olímpico
Juegos de Tokio 1964
Medalla de oro 
(Categoría Open)

domingo, 17 de febrero de 2013

“Me retiré con la espina clavada de no ganar un mundial”


“En mi época, el entrenador era una persona más importante que el alumno, y se entrenaba de forma dictatorial.”

“El proyecto de la Mina se creó para dar un espaldarazo al deporte femenino, y revitalizar la zona donde los recursos muchas veces no son los más efectivos”

“El doping fue el momento más duro de mi carrera deportiva sin duda, después de aquel momento, pasé cincuenta controles más de orina y sangre y no di positivo en ninguno más”

Gervasio Deferr, o Gervi, como le gusta que le llamen, ha tomado una de las decisiones más importante de su vida. Finalmente a los 30 años ha puesto punto y final a su exitosa carrera deportiva. Pero el doble campeón olímpico no ha abandonado el mundo de la gimnasia. Además de colaborar en el Centro de Alto Rendimiento (CAR) de Sant Cugat ha puesto en marcha un proyecto muy especial. Gervasio Deferr da nombre a un club de gimnasia junto con otros deportistas Españoles:“La Mina ha sido históricamente un barrio marginal y con este proyecto queremos poner nuestro granito de arena”, afirma Deferr, ilusionado con la nueva etapa que afronta como entrenador.

¿Contento con la nueva etapa de entrenador?
Yo me lo paso muy bien con la gimnasia. Muchas veces soy el primero en entrar y el último en salir. Me pasan las horas y no me doy cuenta realmente lo que disfruto en esta profesión. Además, me retiré en el momento justo de mi carrera deportiva, cuando vi que ya mi función estaba en entrenar a los niños.

¿Cómo ha ido el cambio de dar saltos a enseñarlos?
En mi época el entrenador era una persona más importante que el alumno, y se entrenaba de forma dictatorial. En cambio, ahora las prioridades son más claras y el gimnasta es lo primero, el entrenador el segundo y después los médicos, fisioterapeutas etc…

¿Qué es lo que le está costando más como entrenador?
Bien, la verdad es que intento aplicar todo aquello que me han enseñado mis profesores durante mi carrera deportiva. Así, como todo lo que he aprendido por mis experiencias personales ,como también, por la ayuda que he recibido de mis compañeros de profesión Víctor Cano, Andreu Vivó, Manuel Carballo etc..

Teniendo en cuenta la crisis existente y el recorte que habido en el plan ADO para los deportistas ¿Como ves el futuro de la gimnasia española en este país?
 Instalaciones del gimnasio del Car de Sant Cugat
Veo un futuro prometedor, ahora mismo tengo a un chico Dominicano nacionalizado español que se llama Ray Zapata, que va a ser Campeón del mundo. Estamos entrenando duro para que proliferen nuevos valores en la gimnasia Española.

¿La máxima satisfacción de un entrenador, además de formar personas, sería que sus alumnos consiguieran algún día una medalla olímpica?
Si sería una gran satisfacción. De hecho, es por eso que nuestro trabajo cobra significado. Pasamos muchas horas con los chavales esforzándonos para explicarles que es lo que hacen bien o mal. Siempre con la mejor intención de ayudarles y que el día de mañana tengan un futuro como el nuestro. Eso sí, no me gustaría que los chavales intentaran ser Gervasio Deferr o Rafa Martínez, cada uno tiene su manera de ser, y cada uno ha de hacer su camino.

Además de colaborar en el Car de Sant Cugat, también ha puesto en marcha un proyecto deportivo en el barrio de la mina ¿En qué consiste?
Es un proyecto que llevamos conjunto con otros deportistas como Andrea fuentes, Víctor Cano, Carlos. La función era dar un respaldo al deporte femenino, y revitalizar la zona donde los recursos muchas veces no son los más efectivos. En el barrio se practicaba Aerodance, y se hizo hace diez años un club de lucha. Yo pensé cuando me retiré, quiero hacer mi propio gimnasio, y así fue como hace poco más de una año y medio, envié una solicitud al regidor de deportes de San Adrià (Juan Carlos Ramos), que nos aprobó el Proyecto. Ahora mismo la escuela está compuesta por 120 alumnos donde el 70% son chicas, no cerramos la escuela a nadie y cuando llegamos al cupo de gimnastas hacemos listas de espera.

Ilustración de las instalaciones del Car de Sant Cugat
En tu caso con dos medallas de oro y una de plata en los Juegos Olímpicos, si tuvieras que dar algún consejo, ¿Qué se necesita para que un gimnasta sea campeón?
Tiempo, esfuerzo, sacrificio, yo he vivido mi infancia de otra manera. Como título personal, he de decir que no he sacrificado tanto. Cuando mis amigos se iban de fiesta, yo las montaba en el gimnasio con mis compañeros de gimnasia , pero sí que es cierto, que la gimnasia es un deporte muy duro aunque tienes el aliciente de poder  hacer algo que no está a la alcance de muchos.

En los primeros Juegos ibas a por el oro olímpico en suelo y lo ganaste en salto ¿sorprendente?
No, lo que la gente no sabía era que yo iba a luchar en las dos disciplinas, venía de hacer una segunda posición en el campeonato del mundo de Tianjin 1999 y una plata en el europeo de Bremen 2000. En las 5 o 6 pruebas anteriores de la copa del mundo, venía arrasando en la primera posición del ranking. Sí que es cierto, que no es lo mismo los gimnastas que van a las olimpiadas hacer decimoquinto, que los que van a luchar por el oro, y más teniendo en cuenta que me había preparado muy duro esos seis años anteriores, y que te lo juegas todo en un minuto del día señalado en el calendario, pero así es la gimnasia.    

¿Porque los gimnastas empezáis tan jóvenes?
Porque la gimnasia es un deporte en el que tienes que aprender una serie de  fundamentos, de los ejercicios acrobáticos que vas a desempeñar más adelante. Yo empecé con cinco años y acabé mi carrera con treinta años y aún sigo aprendiendo.

¿Cómo te gustaría que fueras recordado?
Me gustaría que se me recordarse por tal y como soy, el “Gervi” campeón Olímpico. Entiendo que como personaje público tengo que mantener las formas y dar imagen de cara al exterior, que es lo que no hice el año 2002, cuando di positivo por cannabis.

¿El positivo fue el momento más duro en tu carrera deportiva?
Sin duda, hice una imprudencia un día y me sancionaron de forma correcta. Después de aquel episodio, tuve que pasar cincuenta controles de sangre y orina, pero no di ningún positivo más.

¿Y alguna espina clavada?
Siempre hay cosas que se pueden mejorar, me duele el hecho de no haber podido ganar nunca en el campeonato del mundo.

Tu eres un declarado seguidor madridista ¿De dónde te viene esta afición por el club blanco?
Yo soy aficionado del Madrid porque me gustaba Hugo Sánchez delantero centro del cuadro merengue. Me gustaban los goles que marcaba de chilena, y por eso, me aficioné al equipo de la capital.